Thursday, January 26, 2012

Después de Gaddafi





por Emiliano Ruiz Díaz*




La Libia post Gaddafi no ha conseguido aún la paz ni el cese del conflicto generalizado, más bien todo lo contrario. En las últimas semanas recrudecieron fuertemente los enfrentamientos entre distintos sectores de una sociedad convulsionada por una rebelión social que devino en una guerra civil intervenida luego por las potencias extranjeras que conforman la OTAN.


Renuncias en el CNT


Desde la caída en octubre de quién lideró Libia durante cuarenta y dos años, las nuevas autoridades del llamado CNT (Consejo Nacional de Transición) han afrontado todo tipo de dificultades, tanto para sentar las bases de una gobernabilidad mas o menos estable como para integrar a diversas fracciones de milicias, las cuales se niegan a entregar las armas que todavía poseen, al ejército regular libio.


Como parte de esta situación, el 22 de enero el segundo mandatario y vocero oficial del CNT, Abdel Hafiz Ghoga debió presentar su renuncia luego de que un grupo de estudiantes en la Universidad de Ghar Yunés, Bengasi, lo abucheara por su pasado en la gestión de Gaddafi. Más tarde una multitud marchó a los cuarteles del CNT en esa ciudad para exigir su dimisión y para reclamar la liberación de una decena de detenidos por los hechos sucedidos en la Universidad. “Mi renuncia es por el beneficio de la nación y es requerida en esta etapa No quiero que esta atmósfera siga y afecte negativamente al Consejo Nacional de Transición y su desempeño”, declaró el renunciante ante las cámaras de la cadena Al-Jazeera.


Similares palabras tuvo al respecto el jefe máximo del CNT, Mustafa Andel Jalil, quién pidió paciencia al pueblo libio. "Estamos atravesando un movimiento político que puede llevar al país a un agujero sin fondo -declaró Jalil- hay algo detrás de estas manifestaciones que no es por el bien del país”. No parece resultar casual que uno de los principales focos problemáticos para la gestión de Jalil se desarrolle en Bengasi, al este del país, pues fue la región en donde se inició la revuelta contra el asesinado Gaddafi.




La toma de Bani Walid



Al día siguiente de la renuncia, el 23 de enero al mediodía, estalló en la localidad de Bani Walid (150 kilómetros de la capital Trípoli) una serie de choques armados entre una fuerza aliada al CNT autodenominada “Mártires del 28 de mayo” que custodiaba la zona y un grupo de disidentes a quienes la agencia Reuters, y posteriormente diversos portales de noticias del mundo, atribuyó filiación gaddafista. El enfrentamiento produjo al menos 4 muertos y más de 20 heridos en la fuerzas del CNT que perdieron el control del lugar.


Si bien en el inicio se habló de seguidores de Gaddafi que habrían ondeado la bandera verde de la Yamahiriya y tomado Bani Walid, primeramente el ministro del interior libio Fauzi Abdelali y más recientemente el representante especial de la ONU para Libia, Ian Martin negaron que se tratara de gaddafistas, aunque ambos debieron reconocer que efectivamente existe en la localidad una situación de agitación interna y que ante esto se debió enviar refuerzos.


"El Gobierno respondió enviando unidades del Ejército nacional y ahora se reúne con todas las partes para contener la situación y responder a los desafíos políticos y en materia de seguridad a los que se enfrenta Bani Walid", declaró Martin ante la ONU y la prensa mundial. La información que llega es cruzada y aún no se puede conrfirmar con certeza. Bani Walid junto a Sirte (devastada por los bombardeos de la OTAN) fue hasta último momento bastión del régimen de Gaddafi durante los más de 8 meses que duró lo que parece ser ahora una primera etapa de la guerra en Libia.


Ante estos sucesos, el miércoles 25 el Consejo de Ministros reunido en Trípoli dio a conocer la formación de un centro de operaciones para abordar la violencia interna que azota Libia, respuesta que busca mostrar decisión política pero que parece evidenciar más fragilidad que cualquier otra impresión.




Torturas en los centros de detención


Completando el complejo panorama, este jueves volvieron a la primera plana las denuncias de vejaciones y tortura en los centros de detención del país, donde se calcula hay miles de prisioneros de guerra. Navi Pillay, comisionada de la ONU para los Derechos Humanos informó que "el Comité Internacional de la Cruz Roja visitó a más de 8.500 detenidos en aproximadamente 60 centros de detención en el período comprendido entre los meses de marzo y diciembre de 2011. La mayoría de los detenidos se encuentran acusados de ser leales a Gaddafi y entre ellos figuran una gran cantidad de ciudadanos africanos subsaharianos. La falta de supervisión por parte de la autoridad central genera un ambiente que lleva a la tortura y al trato enfermizo”.


Por su parte, la organización Médicos sin Fronteras emitió este jueves un comunicado en el que anuncia su cese de actividades en las cárceles de la ciudad de Misrata debido a que tebían que atender a gran cantidad de pacientes heridos de tortura durante interrogatorios. “Nos traían a los pacientes a mitad de los interrogatorios para que les diéramos atención médica, se recuperaran y pudieran seguir torturándolos. Esto es inaceptable”, declaró su director general, Christopher Stokes. Ante estas denuncias voceros del gobierno libio admitieron que hay “acciones individuales” en este sentido pero que de ningún modo avalan estas prácticas.


La Libia después de Gaddafi no ha encontrado aún la estabilidad en ningún terreno y dados los últimos sucesos no parece ser asunto a resolverse a la brevedad.


* Artículo escrito originalmente para Marcha

Wednesday, January 25, 2012

El representante de mandinga

Cuando los temblores hicieron trizas los primeros platos y copas no todos en el pago sabían de la muerte fresca de un representante de mandinga. Apenas pudimos dar la voz de alarma en tres ranchos y ya empezaron a sacudirse todas las cosas. Unos minutos antes mi padre había tomado a ese gallo negro por el pescuezo y se lo había retorcido como si escurriera un trapo de piso henchido de agua. Luego lo arrojo por la ventana y vimos como cayó sobre el pasto, bien fallecido. Y dijimos hay que escapar porque se viene y hay que avisar a todos. Era de nochecita y la luna alumbraba el pueblo en desgracia.

26-01-12

Thursday, January 12, 2012

Sueño con serpientes

Un anciano en cueros reposa sobre las rocas a orillas del agua. Puedo verlo de perfil, oscurecido su rostro por las sombras en la gruta. Se cuela una débil luz a través de los intersticios que se forman entre los bloques de piedra apilados. En el agua hay dos o tres sapos enormes que flotando boca arriba muestran sus panzas blancas. No sé si duermen o agonizan. Hay un cocodrilo quieto. Hay sobre un camalote una larga serpiente enroscada.
Mi hermano quiere nadar y no presta atención a mis reparos. "Esta infestada" le digo. "Sí, pero mirá, la serpiente está muerta y no tiene cabeza" me dice y la toma entre sus manos chorreantes.
Antes de irme lo veo al anciano por última vez. Lo reconozco, de apellido se llama Galtieri y alguna vez fue presidente de facto. Ahora descansa su viejo cuerpo en esa gruta. No sé si está dormido o agoniza junto a las otras criaturas de ese lugar apenas iluminado y lleno de silencio.

12-1-12